Que a una marca le conviene tener sus puntos de venta correctamente ubicados en los mapas online y en las aplicaciones que utilizan la geolocalización es algo sobradamente confirmado. Sin embargo, esto se realiza poco y pobremente: una cantidad sorprendente de marcas tiene sus direcciones físicas mal puestas –o ausentes– en los servicios de mapas o georreferenciación online.
También es muy común encontrar duplicados o triplicados del mismo punto de venta o con datos clave equivocados, como los números de teléfono o los horarios de atención.
Esto una de las cosas más básicas del marketing online, pero muy pasada por alto.
Los clientes necesitan –sin excepción– saber dónde está el punto de venta de una marca antes de poder comprar allí. Hay que ayudar a que encuentren lo que buscan; hay que estar geolocalizados para vender.