¿Seguinos en Twitter? ¿Por qué? ¿Para qué?
Cada día más y más marcas abren una cuenta en Twitter con el casi único objetivo de poder pedirle a sus clientes y contactos que los sigan por ese canal. No porque tengan algo nuevo para decir, no porque aprovechen las particularidades de Twitter, no porque ese canal sea mejor que otro para determinados mensajes; solo por poder pedir que los sigan.
Twitter tiene muy poco sentido si no se ha establecido con mucha claridad para qué tener una cuenta y qué hacer con ella. El inapelable fluir de la información en tiempo real hace casi invisibles a las marcas que están en Twitter sin saber muy bien para qué.
A diferencia de Facebook, en Twitter no es posible -aun- comprar seguidores mínimamente interesados en la marca, lo que transforma el armado de una pequeña comunidad en un trabajo realmente difícil.
Es mejor no tener cuenta en Twitter que tenerla de adorno digital.